Se posó en su mano suave
y el corazón le latió pío pío
su voz se volvió viento
y su risa un manantial.
No necesito nada más -dijo la niña-
para ser feliz.
para ser feliz.
¿Nada más? -se sorprendió un erudito
¿Ni casas ni bolsos ni lazos
ni tiovivos?
ni tiovivos?
Nada más.
¿Ni caramelos ni flores ni colores
ni zapatitos?
ni zapatitos?
Nada más.
¿Y cómo lo sabes?
Me lo ha dicho un pajarito
Y vuelvo a las ilustraciones infantiles.. Este es un dibujo que tenía hace tiempo y que he trabajado a lápiz y color digital. También he trabajado un poco el collage para conseguir las texturas del fondo.
Para esta ilustración mi hermana María Cuéllar ha escrito una preciosa poesía.
Esperamos que os guste!